Con el cierre de Ciudad Abierta TV se pierde buena televisión.

BUENOS AIRES.- El multimillonario Mauricio Macri, flamante Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, ha dejado trascender a través de sus declaraciones posteriores a los comicios que cerrará el Canal de televisión perteneciente a Buenos Aires. Sospechando que estamos ante los últimos meses de emisión, hicimos una profunda obervación a su programación, que por su calidad, debería ser emitida por señal de aire y no solo por cable (por suscripción).

Ante un presente de televisión basura que está achatando la cultura popular, en la que apenas se ven bailes o realitys que poco aportan, junto a Encuentro (del Ministerio de Educación de la Nación) y algunas franjas horarias del Canal 7, la emisora Ciudad Abierta TV es un aire de refresco de muy buenos contenidos, que invitan a reconciliarse con el soporte televisivo. Lejos de las urgencias comerciales, actores jóvenes o no (pero que no han trascendido en la pantalla de los grandes a pesar de su calidad actoral) hacen honor al género de ficción con ciclos importantes y constructivos (e instructivos) tales como “Mi señora es una espía”, “9mm” y otros. Ciclos documentales en los que se ven los clubes de barrio o las historias de las calles. Entrevistas a escritores y a intelectuales. Debates que van desde el dinero (sobre el cual hay mucho para hablar y más a la luz de la administración pronta a asumir) hasta la sociología.

Marcelo Larraquy es el mentor de la serie de ficción “9 mm”, que lejos de caer en sanguinolentas escenas de crímenes, se atreve a reconstruir hechos históricos muy últiles sobre todo para aquellos jóvenes que desconocen la experiencia de los años 70. El ciclo tiene la suficiente calidad como para que muchos actores de renombre acepten gustosos participar en algunos de sus capítulos unitarios.

Felipe Pigna, el historiador más mediático de la actualidad, tiene un ciclo llamado “Reflexión sin intermediarios” en el que con una estética novedosa solo aparece el entrevistado (generalmente un intelectual) tocando temas profundos.

Algo que resulta muy novedoso es la retransmisión de clases (en su mayoría de la Universidad de Buenos Aires) que permiten demostrar los tesoros que esconde nuestro sistema educativo, en el ciclo “Quién lo dice”.

Entre otras cosas a destacar es que el ritmo ha mejorado muchísimo desde su fundación, probablemente como consecuencia de que ha encontrado un eje temático (que en este caso juega desde la diversidad de intereses y géneros) pero con el norte claro de la calidad. Cuando esta está presente, cualquier género es valedero.

Por el momento se han suspendido las contrataciones y todos sus empleados están a las expectativas de su continuidad. La pregunta que desde Tecum nos hacemos es siempre la misma: ¿Por qué estos canales estatales no están al acceso libre de las clases que no pueden pagar una señal de cable por suscripción? En la actualidad solo se lo puede ver en Telecentro (82), Multicanal (80) y Cablevisión (84). Mientras dure.

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2007-07-31