Los
gobiernos necesitan medios estatales.
Los resultados electorales no coinciden en porcentaje con la ideología
de los medios privados. Los aires de democracia popular de Latinoamérica
necesitan medios estatales poderosos.
Identidad nacional, su relación
con las Industrias Culturales.
Por
José Alfredo Borotti.
Las industrias culturales se han convertido en uno de los mayores instrumentos para la promoción de la cultura y las artes. El acrecentamiento de su poderío económico las ha posicionado como uno de los sectores productivos de mayor importancia. Por ser de alto valor simbólico, las mismas influencian la percepción del mundo que predomina en cada sociedad. Gustavo López, inicia esta entrevista desarrollando la relación entre globalización y la cultura. Demuestra, a lo largo de la misma, que para poder pensar en profundidad los cambios sucedidos a nivel global en relación con la cultura, es necesario tener mente abierta, reflexiva y serena, unida a un decidido espíritu indagador y un firme compromiso con la defensa de la identidad nacional.
¿Cómo
impactó la globalización en el campo de la cultura?
A partir de la globalización, en el campo de la cultura comenzaron
a darse dos fenómenos de manera paralela. El primero, de resistencia
a la mundialización desde el ámbito local. Nacen movimientos
sociales cuyo objetivo es preservar las producciones locales. Así mismo,
los gobiernos locales comienzan a coordinar acciones de interés común
y fijan agenda pública en materia cultural. El segundo fenómeno,
fue el de la creación de la Agenda 21 de las Ciudades por la
Cultura, firmada por más de 450 alcaldes de todo el mundo. Dicho
fenómeno se inició en Porto Alegre en septiembre de 2002 durante
La 1° Reunión Pública Mundial de la Cultura.
Evolucionó en sus contenidos hasta ser presentada en septiembre del
2004 a Naciones Unidas (HABITAT y UNESCO).
Finalmente, en octubre del 2006 en la ciudad de Barcelona se celebra la Primera
Reunión del Grupo de Trabajo en Cultura en donde se aprueba los documentos
con los principios de la Agenda 21 de la Cultura.
¿Podría mencionar algunos de los principios más importantes
de la Agenda 21 de la Cultura?
Fueron muchos pero algunos de los más importantes que trascendieron
e impactaron en la creación de políticas públicas fueron:
1) la diversidad cultural como el principal patrimonio de la humanidad. 2)
cultura como el medio ambiente son considerados como bienes comunes de la
humanidad. 3) los gobiernos locales reconocen que los derechos culturales
forman parte indisociable de los derechos humanos, en este sentido, se ratifica
que la libertad cultural de los individuos y las comunidades resulta condición
esencial de la democracia. 4) el carácter central de las políticas
públicas de cultura es una exigencia de las sociedades en el mundo
contemporáneo. Por último, la apropiación de la información
y su transformación en conocimiento por parte de los ciudadanos es
un acto cultural. En consecuencia, el acceso sin distinciones a los medios
de expresión, tecnológicos y de comunicación y la constitución
de redes horizontales fortalece y alimenta la dinámica de las culturas
locales y enriquece el acervo colectivo de una sociedad que se basa en el
conocimiento.
¿Cómo evolucionó la idea de Industrias Culturales?
De Industrias Culturales se habla desde hace unos 30 años. El concepto
nace en Europa, liderado por Francia. Durante esa época, se generan
marcos jurídicos regulatorios nacionales y regionales. Su objetivo
fue proteger las producciones audiovisuales frente al avance de la producción
audiovisual norteamericana. Actualmente, los Estados Unidos, facturan alrededor
de 500 mil millones de dólares. Esta cifra, representa la segunda fuente
de ingresos de sus exportaciones La participación actual norteamericana
en el mercado audiovisual global es del 85%.
¿Qué herramienta utilizó Europa para proteger su
mercado audiovisual?
Lo que los europeos denominaron cuota de pantalla. Esto implica
la obligación que tienen los exhibidores de incluir en su programación
las producciones nacionales.
¿Hay que entender entonces, que existen dos concepciones diferentes
de Industrias Culturales?
Sin duda; dos posiciones antagónicas; la europea y la norteamericana.
Comencemos por la primera.
En la primera, la Unión Europea, liderada por Francia, el Estado
nacional y municipal, adquieren un rol fundamental ya que se fomenta la producción
y la diversidad cultural. Nosotros adscribimos a este principio igual que
lo hace Méjico y Canadá, a los que luego se suman a partir del
2005 Uruguay, Brasil y Chile.
Para esta visión cuyo objetivo es preservar la identidad, la producción
y la diversidad cultural, el fomento es el contrapeso de la globalización.
Para nosotros las industrias culturales suponen siempre la existencia de un
objeto o servicio de contenido simbólico intrínseco. En estos
países, los bienes y servicios culturales quedaron excluidos de la
Organización Mundial del Comercio-OMC-.
¿Que plantea la posición norteamericana?
Los norteamericanos quieren que los bienes y servicios culturales se conviertan
en mercancías de libre comercio. Los bienes y servicios deben equipararse
a cualquier otra actividad económica. Para esta concepción,
no hay un bien simbólico que proteger. Bajo esta concepción,
Argentina debería eliminar las políticas de fomento ya que todo
debe quedar en manos de cadenas de valor extranjeras. Los norteamericanos
hablan de la Industria del Entretenimiento; del marketing del entretenimiento
para impulsarla globalmente. Así lo hacen desde principios del siglo
XX cuando iniciaron el negocio cinematográfico y fonográfico
a escala global. La concepción que tienen en el campo cultural es diferente
ya que si bien denominan industria del entretenimiento a la industria del
libro, la fonográfica, la audiovisual, también incluyen los
casinos, los hipódromos y demás actividades relacionadas con
el ocio en general y el tiempo libre.
¿A pesar de este antagonismo, existe un concepto claro y definido
de Industrias Culturales?
El concepto de Industrias Culturales aún se mantiene difuso. Se
las denomina de diferentes maneras: industrias creativas, industrias del entretenimiento
e industrias del copyright. Algunos autores mencionan como componentes de
las Industrias Culturales a la producción y circulación de libros,
discos, cine, radio televisión y la publicidad. Otros, limitan el espectro
al disco, el libro, revistas, diarios, cine, no considerando los medios de
comunicación electrónicos. Pocos limitan el espectro de las
Industrias culturales a la gastronomía, el turismo, el deporte, la
moda el sofware y las industrias del entretenimiento en general.
¿Cómo entiende Argentina el concepto de persona inserto
en la actividad de las Industrias Culturales?
Nosotros entendemos que el hombre como ser social, construye su subjetividad,
(el impacto emocional y cognitivo que despierta un hecho, objeto o situación)
con otros que lo hacen sentir persona (entramado intersubjetivo que resulta
constitutivo de la identidad). De esta forma, la cultura y el arte transforman
de manera dinámica ese ser social; por lo tanto, es muy importante
mantener políticas públicas de fomento, protección y
desarrollo que preserven la diversidad cultural.
¿Frente a este nuevo escenario, cuál es el significado que
tiene la cultura?
Para nosotros, la cultura es una herramienta que sirve para la transformación
personal y colectiva de una sociedad que de esa forma consolida su identidad
nacional. En Argentina, la producción cinematográfica se sostiene
por aplicación de la ley que fomenta la actividad. En nuestro país
se producen anualmente 80 películas, pero menos del 10% de esas producciones
recuperan el costo. La concepción norteamericana, considera a la producción
y consumo cultural como mercancía, utilizada para invertir el tiempo
ocioso, también llamado tiempo libre. Según este criterio los
consumos culturales dejan de tener un lugar central en la formación
del individuo y se equiparan a cualquier otra actividad de esparcimiento:
leer un libro, jugar en el hipódromo o en un casino. En consecuencia,
cualquier bien suntuario o accesorio puede ser reemplazo por otro entretenimiento.
¿Podría ampliar el significado de diversidad cultural?
La diversidad cultural parte del respeto por la diferencia, el respeto
por lo diverso. Exige mutuo respeto y reconocimiento del derecho de los pueblos
a mantener su identidad a través de la preservación de sus culturas.
Este concepto surge de la UNESCO durante la 31° Reunión de su Conferencia
General -2001-en donde se aprobó la Declaración Universal
sobre la Diversidad Cultural. Luego se ratifica en el año 2005, por
medio de La Protección de la Diversidad Cultural.
¿Qué influencias tuvieron en nuestro país los conceptos
de Diversidad Cultural?
Nosotros veníamos de un proceso de construcción social de
identidad del excluido, desarrollado durante la década de 1990. Vivíamos
como país el brutal avance de la globalización cuyo instrumento
la Organización Mundial del Comercio-OMC-, presionaba para lograr el
libre comercio y desregulación de los productos culturales. Frente
a este escenario la Declaración de la UNESCO, abrió un espacio
simbólico legítimo desde donde postular una visión alternativa
no hegemónica de las culturas.
Siguiendo el ejemplo la Unión Europea, quedamos excluidos en relación
a los bienes y servicios culturales de la Organización Mundial del
Comercio-OMC- y logramos inscribir la industria audiovisual en el marco de
las industrias culturales fomentando los contenidos de producción local.
A partir de 2004 nuestros gobiernos municipales comienzan a generar políticas
culturales. Los municipios se posicionan como hacedores de la cultural: pintarás
tu aldea y retratarás el mundo. El antecedente político
que nos marcó el rumbo fue el Foro Mundial de Porte Alegre y el Movimiento
Municipalista de San Pablo de 2000. En definitiva, la cultura y las industrias
culturales como expresión económica y productiva, ocupan un
lugar trascendente en la construcción de la identidad nacional y en
la preservación de la diversidad, condición necesaria para ocupar
un lugar en el mundo globalizado.
¿Que cambios se produjeron en el país durante 1990 que dieron
origen al concepto de Industrias Culturales?
En la Argentina, las industrias culturales presentan un desarrollo signado
por un funcionamiento separado de las diferentes industrias y sectores: radio,
televisión, cine, prensa gráfica, editorial, sector fonográfico
y más recientemente la red Internet.
Sin embargo, los procesos de convergencia tecnológica y la creciente
importancia económica y simbólica de las actividades culturales,
influyeron para que a partir de finales de la década del ochenta, se
presentaran cada vez más articulaciones entre industrias y sectores.
Estas nuevas articulaciones, generaron en 1990 una importante transformación
de las industrias culturales. Aparecieron nuevas actividades: televisión
por cable, vía satélite e Internet. Cruces convergentes entre
alguna de ellas y la concentración de la propiedad y centralización
de capitales. Estos cruces, influyeron en la inserción de nuevos protagonistas
y actores, en muchos casos, ajenos al campo cultural. También supuso
el ingreso de capitales financieros sin precedentes en la historia de las
Industrias Culturales.
¿Cuáles fueron las políticas públicas que
dieron respuesta a este nuevo escenario global?
En el mes de abril de 2002, durante mi gestión como Subsecretario
de Gestión de Industrias Culturales de la Secretaría de Cultura
del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, se crea un espacio de consenso
multisectorial para el diseño de políticas públicas y
privadas tendientes a la defensa, promoción y fomento de la producción
de bienes culturales. Nace de esta manera, el Foro para la Defensa de
las Industrias Culturales de la Ciudad de Buenos Aires, en donde se
proponen debates para la creación de políticas públicas
para el desarrollo del sector, sabiendo que la defensa de la identidad cultural,
no es otra cosa que la defensa de nuestra identidad como Nación.
¿Qué acciones se propuso este Foro?
Favorecer la protección del patrimonio cultural de los argentinos,
reconocer a las Industrias Culturales como uno de los sectores económicos
más dinámicos, con mayor potencial de expansión y con
mejor capacidad de generación de puestos de trabajo. Impulsar el tratamiento
de marcos jurídicos regulatorios del sector aún pendientes con
el objeto de asegurar el establecimiento de políticas de Estado en
materia cultural. Propiciar el establecimiento definitivo del sistema estatal
de medios públicos, resguardar las Industrias Culturales de capital
nacional, fomentar la producción y exhibición de contenidos
nacionales y Establecer un marco de participación en el desarrollo
del plan estratégico de la Secretaría de Cultura del Gobierno
de la Ciudad de Buenos Aires.
¿Qué resultados produjo este Foro?
Los más importantes fueron las normas de fomento de algunas industrias
culturales: ley 24.377 y su decreto reglamentario 1428/01 de Fomento de la
Actividad Cinematográfica Nacional. Ley 25.446 Fomento del Libro y
la Lectura y la ley 25.750 del Preservación de Bienes Patrimonios Culturales
y el año pasado la promulgación de la ley 26.522 de Servicios
de Comunicación Audiovisual que sustituyó a la Ley de Radiodifusión
22.285. Esta legislación basada en la Doctrina de la Seguridad Nacional,
consideraba a la comunicación como una cuestión de Seguridad
del Estado y no como un derecho básico de los habitantes de un país.
¿Esta iniciativa fue acompañada por instituciones de la
sociedad civil?
Si por supuesto. Las instituciones que nos acompañaron lo hicieron
con mucho entusiasmo y compromiso: Asociación Argentina de Actores,
Asociación Argentina de Empresarios Teatrales, Asociación Argentina
de trabajadores de las Comunicaciones, Cámara Argentina de Productoras
Independientes de Televisión, Directores Argentinos Cinematográficos,
Federación Argentina de Productores Cinematográficos y Audiovisuales,
Federación Argentina de Trabajadores de Prensa, Federación de
Trabajadores de Imprenta, Diarios y Afines, Sindicato Argentino de Televisión,
Sindicato Argentino de Locutores, Sindicato Argentino de Músicos, Sindicato
Único de Publicidad, Sindicato Único de Trabajadores del Espectáculo
Público.
Febrero 2010. José Alfredo Borotti (C)